Llegada a Maliana!
Poniendo un pie en suelo timorense, salimos a descubrir una nueva realidad. Rápidamente nos dimos cuenta de que habíamos aterrizado en otro mundo.!
Teníamos muchas ganas de ponernos en contacto y conocer a este pueblo que tanto sufrió., porque, hace años que, nosotros acompañamos, a través de los medios de comunicación, varias masacres a las que fue sometido en la lucha por la ansiada libertad…
Timor es un país lleno de niños y jóvenes, porque muchos adultos murieron, en este momento. Muchos niños quedaron huérfanos., porque la libertad le costó cara a esta gente; murieron unas doscientas mil personas.
todo era muy diferente: casas, las personas, a comida, os disfraces…
También estábamos esperando saber dónde trabajaría mi esposa., ya que es profesora y forma parte de un proyecto de cooperación entre los gobiernos portugués y timorense.
en el final, le dijeron que debía enseñar en Maliana, una ciudad ubicada en un municipio 140 kilómetros de Dili, una capital. Parece cercano, ¿no?? Pero, en realidad, el camino no estaba a nuestro favor y nos llevó unos 4 horas en la ruta, cuando el día estaba soleado.
En la temporada de lluvias, Las lluvias tropicales torrenciales arrancan árboles y mueven enormes piedras que a veces pesan cientos de kilos., siendo proyectado por las laderas, De modo que la carretera queda completamente bloqueada y la gente suele esperar horas antes de poder continuar el viaje..
Maliana es una ciudad tranquila, muy verde, llena de arrozales y situada al pie de una hermosa montaña.
Muchos animales pasean relajados por las calles: vacas, cerdos, búfalos, cabras, gallinas, pollitos, patos. Vimos algunos ciervos y monos., pero lamentablemente en cautiverio.
Cada vez que salíamos a la calle escuchábamos la expresión: Arena, Arena (extranjero)! Al principio no nos gustó mucho esta expresión., pero con el paso del tiempo nos dimos cuenta de que no estaba dicho en sentido despectivo y nos acomodamos…
La sonrisa de los niños fue algo que nos capturó inmediatamente., así como la sencillez y alegría de la gente, viviendo sin muchas pretensiones.
Hicimos algunos amigos que siempre recordaremos con mucha nostalgia y placer..